Abyaneh

Viaje en el tiempo

Abyaneh, uno de los pueblecitos más particulares de Irán. Situado en un verdoso oasis del desierto, llega a tener 500 habitantes. ¿Parece poco, verdad? Sí, pero también es cierto que entre los pueblos más antiguos de Irán (tiene más de 2.500 años de antiguedad), es de los que más habitantes tiene. 

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¿Qué destaca de este poblado además de su antiguedad? Si estuvieras allí, lo entenderías. Son sus rojas casas lo peculiar de este pequeño pueblo; el único lugar de casas rojas de Irán. Fueron construídas de ladrillo rojo, que contiene altas concentraciones de óxido ferroso. 

Las casas se sitúan en una llanura, y está una unida a la otra en forma de terraza. 

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El mejor lugar para tomar fotografías es desde la ladera opuesta a Abyaneh, donde los árboles crecen junto al río, contrastando con el color rojo de las casas y de las montañas que rodean al pueblo. 

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Pero, aunque el pueblo en sí ya tenga mucho atractivo, si nos adentramos dentro de él, descubriremos mucho más: el Templo de Fuego de Harpak, que perteneció a los zoroastrios; caminos, mezquitas, patios y estrellas calles... La Mezquita tiene el nombre de Haajatgah, y está construida del mismo material que las casas.

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Más sitios que ver en Abyaneh: Porzaleh, Templo de Eisa, Templo de Hinza y la fortaleza de Herdah.

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Pero esto no se acaba aquí. Hay algo que contrasta con rojo poblado desde su nacimiento: el folklore. La vestimenta de esta región es muy diferente a la del resto de Irán. Sus habitantes han mantenido en vida los coloridos vestidos tradicionales.

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El mérito de este hecho fue que, en 1973, Abyaneh se denominó Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. 

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